domingo, 19 de octubre de 2008

¿Qué hay detrás del caso Woodward?

 A las personas medianamente informadas les llama la atención que en el caso de Miguel Woodward (QEPD) se  haya procesado a trece marinos después de más de TREINTA Y CINCO  años de su muerte, puntualmente porque en su caso específico CONSTA SU MUERTE, por lo tanto no cabe hablar de “detenido desaparecido”, y por lo mismo, no cabe la aplicación de dicho subterfugio para excusarse de aplicar la ley de amnistía, PLENAMENTE VIGENTE, toda vez que NUNCA ha sido derogada.

 Para quienes no lo saben, y de “buena fe” asumen que el señor Woodward estaría “SECUESTRADO EN ALGUN LUGAR DURANTE LOS ÚLTIMOS TREINTA Y CINCO AÑOS”, cabe remitirse a los propios órganos de prensa izquierdista, que dan fe de su MUERTE (que en todo caso no ocurrió en la “Esmeralda”, como ellos majaderamente afirman)  para quienes tengan dudas por favor revisen La Nación  y El Clarín de Chile 

 Al margen de la abusiva aplicación de la estrategia marxista de “miente, miente, que algo queda”, cabe preguntarse ¿Qué hay detrás de todo este despliegue periodístico y parafernalia judicial?,  como se puede constatar al apreciar la reiteración de argumentos falaces, como la insistencia de la casi totalidad de los medios de prensa en llamar “sacerdote” a un persona a quien la jerarquía eclesiástica había separado de sus funciones sacerdotales precisamente por su reconocida actividad ideológica subversiva, a lo que suma (complementariamente)  su convivencia carnal con una mujer, situación de público conocimiento.    Se quiere hacer creer que poco menos que fue detenido “mientras hacía misa”…   y se rehúye indicar los motivos de su detención.   Sin indagar en los motivos de su detención, se le brinda un manto de “INOCENCIA”, amparado en una calidad de sacerdote que había perdido por decisión propia al preferir, por sobre la Doctrina cristiana de la Caridad,  la doctrina marxista del Odio.

 ¿A quien se está juzgando?  Muchas personas concurrimos a la Corte de Apelaciones de Valparaíso, motivados por la solidaridad y agradecimiento hacia quienes arriesgaron sus vidas para evitar la guerra civil,  y con gran SORPRESA hemos escuchado a abogados de organismos fiscales (vale decir: pagados por el erario nacional) ensañados en formalizar como acusado a  ¡LA ARMADA DE CHILE!   Grotesca afirmación emanada de los propios abogados querellantes, ante la impávida presencia de los ministros de la Corte, argumentando que en este caso específico se podía establecer la “RESPONSABILIDAD INSTITUCIONAL…”

 Ni siquiera un alumno de primer año de Derecho podría suponer tremenda "BURRADA", las responsabilidades penales son INDIVIDUALES

 Pero esta estrategia mediática-judicial-política tiene dos objetivos que por propia declaración quedan en EVIDENCIA:

 1)      LA RESPONSABILIDAD INSTITUCIONAL es un argumento “ideológico” (NO LEGAL)  para descalificar las normas e instituciones democráticas frente a las cuales el marxismo asume la “vía armada” que se concreta a través de la “revolución” o “guerra civil”  escenario que frustraron nuestras FF.AA. y Carabineros el 11 de septiembre de 1973.  Situación que para los jueces, abogados y periodistas ideológicamente comprometidos, es en si mismo un CRIMEN IMPERDONABLE.

2)      DE LA RESPONSABILIDAD PENAL,  NACEN RESPONSABILIDADES CIVILES.   Ya esta demostrado hasta la saciedad, que ex-subversivos y familiares disfrutan de “generosas pensiones” que el Estado Chileno (administrado por ellos mismos) reparte a destajo, bastando incluso una “declaración simple”, sin acreditar medio de prueba alguno, para recibir PENSION como “torturado político”.   Es evidente entonces, que se trata de una clara maniobra que teniendo un origen ideológico extremista, y disfrazada de “pseudo legalidad” en realidad es una nueva arremetida contra las arcas fiscales…  

Impriman este artículo y guárdenlo…  en unos meses o años más verán como bajo este pretexto una cantidad increíble de abogados, periodistas, familiares, amigos, correligionarios, compañeros, parientes, herederos, etc., hacen fila para cobrar “jugosos cheques fiscales”…

 ¿Para qué “honorarios brujos”, sobresueldos en sobres, “asesorías mulas”, etc., y que más encima “hay que hacer papeleo todos los meses”?

Mejor  un “buen juicio”…  y después a cobrar cheques todos los meses…  ¡De por vida!

 “No es malo” dirán “ellos”…   

 ¡Lástima que sean NUESTROS impuestos!   

 Y lo peor de todo, mientras “arman su cuento”, procesan, calumnian, privan de libertad y separan de sus familias a gente HONORABLE…